El 8 de marzo es el día internacional de la mujer trabajadora, es un día importante en el reconocimiento de los feminismos y del papel de las personas leídas como mujeres en todo lo que nos rodea. Este día se estableció para conmemorar la lucha constante de las mujeres por su inclusión y participación en la vida pública de la sociedad, por reivindicar que como mitad de la población también tenemos derecho a ser partícipe de ella, extendiéndose esta lucha luego a otros colectivos igual de oprimidos e invisibilizados por esta hegemonía patriarcal en la que vivimos.
Pero llegar a reconocer esta lucha, hacer ver esta situación y reivindicar no ha sido una tarea fácil para las mujeres. El lunes 5 de marzo realizamos desde Indàgora un cinefórum con temática especial feminista, dentro de las jornadas de reconocimiento de esta semana, en el cual proyectamos la película “Las Sufragistas” y pudimos ver cómo, en 1918 las mujeres eran perseguidas, arrestadas, maltratadas y ninguneadas por el hecho de querer sentirse parte del mundo, por buscar tener un lugar en el día a día y en la ley, reclamando el derecho a voto.
En 1911, año en el que se celebraba por primera vez el día de la mujer (En algunas partes de Europa), en donde además de proclamas políticas se exigía el derecho al trabajo, a la no discriminación laboral y se apoyaba el movimiento de las sufragistas para el derecho a voto, ocurre uno de los más trágicos sucesos que puso de relieve la situación de entonces: una fábrica de textiles es incendiada con sus trabajadoras dentro, por querer reivindicarse y exigir sus derechos.
En 1975 la organización de las naciones unidas (ONU) establece entonces el 8 de marzo como el día internacional de la mujer, ¡64 años después! tardaron un poco ¿eh?
El camino para conseguir una equidad está siendo muy largo, y tarda en asentarse, es por eso que días como este jueves 8 de marzo se convoca una huelga internacional feminista, para seguir visibilizando toda esta lucha, toda esta situación en la que aún a día de hoy nos encontramos (aún habiendo ganado derechos, los llamados micromachismos, la violencia, los asesinatos, las opresiones,etc. siguen estando en nuestro día a día).
En nuestro espacio de Videoblog quisimos visibilizar por qué el feminismo sigue siendo necesario, y todo lo que aún nos queda por conseguir. Mediante el relato y las vivencias de 7 personas, trabajadoras y estudiantes sacamos a la luz estos testimonios que les envuelven y damos voz a los argumentos que no siempre tienen tienen espacio en esta sociedad.
El feminismo lleva años reivindicando derechos de la mujer, tanto a nivel político, legal y social, pero va siendo hora de encontrarlo también en un ámbito íntimo, familiar y relacional, en donde aún nos queda muchísimo por hacer. El patriarcado encuentra en el machismo la herramienta ideal para colarse en nuestras casa, en nuestras relaciones, en nuestras intepretaciones. Aunque hayamos conseguido el voto, la cifra de la vergüenza sigue aumentando, los techos de cristal siguen existiendo, las discriminaciones laborales también, las calles no son seguras, somos cosificadas y tratadas como objetos al uso del hombre y seguimos sin que la sociedad en su conjunta reconozca el patriarcado. La mujer ya no quiere estar dominada, al servicio y voluntad del hombre. Quiere ser por sí misma y encontrarnos con otras personas en un ambiente de cooperación y equidad.
Por eso este 8 de marzo saldremos a la calle, haremos huelga de cuidados, de tareas reproductivas, de consumo, estudiantil, para hacer notar este hueco y este vacío que se generará en la sociedad si las mujeres decidimos parar, si decidimos no hacernos cargo por un día de lo impuesto. Saldremos a la calle para decir que no estamos de acuerdo con cómo están las cosas.
Como dice Pikara en este artículo: “No somos pequeñas, ni frágiles, ni sumisas, ni devotas, ni histéricas, ni pusilánimes, ni cobardes, ni invisibles. Somos muchas y grandes. Y durante toda la historia nos han hecho creer que estábamos solas, que no podíamos cumplir nuestros sueños, que no podíamos soñar, que necesitábamos a los hombres para hacer algo en el mundo.”
Este día no felicites a las mujeres por ser bellas, por darlo todo, por ser cuidadoras de la familia, por ser bonitas y algo frágil, no las cosifiques, no las objetivices, ayúdales a recuperar su voz, escúchalas, da un paso atrás y dales espacio, hazte cargo de las tareas que no van a realizar ese día y empieza a ver que no es nada personal, es algo colectivo.
Si eres mujer, recuerda cuantas veces has sentido miedo o has sido sometida por un hombre, por el simple hecho de ser mujer. Si eres hombre y feminista, sabrás que el feminismo es algo histórico, cuestiona los mandatos de género y, por eso, te animamos a que revises tus privilegios y empieces a fomentarlo entre los tuyos.
Feminismo es lucha transversal, es sororidad, es consciencia y darse cuenta, es visibilidad de lo que está pasando, es lucha y vida, son derechos.
“Activismo al final no es salir a la calle solo el 8 de marzo, activismo es lo que haces en tu día a día”
“El primer paso es una consciencia personal para que luego se pueda desarrollar una consciencia colectiva”
“Por todas las mujeres que han luchado a lo largo de la historia. Por todas las mujeres que continúan luchando, que continúan en el camino. Por todas las mujeres que lucharán. Por mi madre, por mi hermana, por mi compañera de trabajo, por las desconocidas.
Luchamos por todo lo que el feminismo puede aportarnos. Luchamos para reconocer que todas formamos parte.
Si paramos las mujeres, paramos el mundo”
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